Recomendaciones para mejorar el sueño
¿Qué beneficios tiene el sueño reparador?
- Dormir fortalece las conexiones neuronales del cerebro, restablece la memoria y ayuda a fijar lo aprendido. Además, el pensamiento es más fluido, la creatividad aumenta y el aprendizaje mejora.
- Mejorar nuestras defensas: el sistema inmunitario emplea el tiempo de sueño para regenerarse, se fortalece para poder luchas contra virus, bacterias, toxinas a los que estamos expuestos cada día.
- Protege nuestro corazón: dormir mal o tener insomnio se relaciona con un aumento de las hormonas del estrés, con el aumento de la tensión arterial y la posibilidad de tener un problema cardiovascular o cardiometabólico.
- Ayuda a perder peso: la falta de sueño reparador o el insomnio hacen que se libere cortisol, aumenta el estrés, aumenta el apetito y se acumule grasa.
- Mejora la sensación de bienestar, promueve la felicidad y reduce la posibilidad de depresión. Esto se debe a que por la noche durante el sueño se produce melatonina, que es precursor de la serotonina o la también conocida, hormona de la felicidad. Es un neurotransmisor imprescindible para las conexiones cerebrales y contrarrestan las hormonas del estrés.
¿Cuántas horas hay dormir?
Se aconsejan dormir aproximadamente 7horas.
¿Cómo puedo cuidar la calidad del sueño?
- Antes de acostarte repasa tu día y evalúa si has conseguido tu reto o tu propósito marcado. Céntrate en los eventos que te hayan hecho feliz ese día y evita trasladar el estrés laboral o familiar a la cama.
- Descansa de pantallas, inhiben la melatonina y no permiten que se genere el sueño de forma natural. Intenta no dormir con el móvil en la mesilla.
- Haz una meditación relajante, lee un buen libro, date una ducha caliente, cualquier hábito que te relaje y que te prepare para dormir. Adquiere una rutina que te ayude a relajarte y repítela cada noche.
- Destina la cama para dormir, no te lleves pantallas a la cama.
- Mantén la habitación ordenada y ventilada, prepara un entorno relajante que te prepare para dormir.
- Mantén horarios regulares para ir a dormir y despertar.
- No hacer siestas muy largas, no más de 15-30 minutos.
- Practica ejercicio con regularidad, pero no después de las 19h.
- Come sano y equilibrado cada día y por la noche prepara cosas ligeras y cena muy pronto, al menos 2horas antes de la hora de acostarse.
- Evita el café y otros excitantes por la tarde y reduce al máximo o suprime su consumo.